(noviembre y diciembre) Es cuando los días empiezan a ser más largos y cálidos y los ríos se llenan con el deshielo de los glaciares. Las truchas hambrientas que salen del desove se alimentan de todo para recuperar fuerzas y peso. En las primeras semanas de noviembre, pescamos principalmente con líneas de hundimiento y streamers, persiguiendo grandes truchas arcoíris y marrones que aún permanecen en los ríos alimentándose de huevos y pececillos. A finales de noviembre y durante todo diciembre, la mayoría de estas truchas regresan a los lagos para pasar el verano allí, y es entonces cuando encontramos las mejores eclosiones de todo el año en los ríos y lagos. Las libélulas, las efímeras y los tricópteros son las principales moscas que se encuentran en las aguas. Todas las aguas en las que pescamos son excelentes en primavera: el río Limay, el río Manso, el río Malleo, el río Alumine, el río Caleufu, el río Pichileufu, el río Chimehuin, el río Colloncura, el lago Fonk, el lago Hess, el lago Roca, el lago Mascardi y el lago Nahuel Huapi.